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Entrevista «Tengo muy claro que en el momento en que deje de divertirme o deje de sentirme feliz en las redes y me supongan una carga, las dejaré» –¿Cree que el consejo farmacéutico se ve reflejado en las redes sociales? –Cuando empecé en redes sociales allá por 2015, éramos muy pocos los que hacíamos divulgación de consejo far- macéutico o hábitos saludables, de información a la po- blación. Siempre he dicho que la divulgación era el patito feo, porque es algo que cuesta, que no es tan amable co- mo, por ejemplo, la cosmética, que genera muchos se- guidores e interés rápidamente. Pero en la pandemia hubo un punto de inflexión; se desató un interés desme- surado por estar informados en temas de salud, y los que hacíamos más divulgación comenzamos a tener un ma- yor protagonismo en redes y a ser más valorados. Todo ello generó que en ese momento se uniera mucha gente y aumentaran los perfiles de divulgación y de consejo far- macéutico o, mejor aún, de consejo de salud, sanitario. Creo que hay una comunidad muy potente que está ha- ciendo un grandísimo trabajo: farmacéuticos, enferme- ros, enfermeras, médicos... Entre todos vamos aportan- do desde nuestros distintos puntos de vista y haciendo un trabajo muy rico. –¿Las redes sociales llegan a ser una extensión de la farmacia física? –Las redes sociales son, al menos, una extensión del es- tilo que tú tienes en la farmacia. A mí me gusta mucho interactuar en la farmacia, y esto se ve reflejado en mis redes sociales. En la comunidad que tenemos en Insta- gram, me gusta mucho que, cuando hablo de un tema, muchos farmacéuticos interactúan, dan su opinión, aportan y hacen crecer el contenido. Esto es muy grati- ficante ya que se establece un diálogo constructivo. Por otro lado, está el usuario que quiere informarse y que va preguntando, o que incluso aporta su experiencia. Ade- más, en Instagram hay una comunidad muy amable, muy social y participativa. –¿Cuáles serían las claves que le indicaría a los far- macéuticos que quieran adentrarse en las redes so- ciales? –Lo primero que les diría es que se preguntaran el por- qué, por qué quieren estar en redes sociales, o dicho de otra forma: ¿dónde te quieres ver dentro de dos, tres, cuatro años? ¿Qué quieres haber llegado a conse- guir o a ser? Porque puedes querer una red social para hacer divulgación, o hacerte un especialista en fitote- rapia, o generar visibilidad, crear marca de tu farmacia porque tienes venta online... Es necesario definir pri- mero los objetivos y luego, en función de ellos, diseñar tu estrategia. Sea cual sea tu objetivo dentro de tu es- trategia, el punto fundamental para mí es el contenido; es el eje sobre el que debe pivotar toda la presencia online de una farmacia o de un farmacéutico. Después, hay que revestir ese contenido de la forma adecuada, dependiendo de la red social a la que va dirigido. Si el contenido es de interés, y puede ser por divulgación o porque ofrezcas productos de interés, es más fácil que te vaya bien o triunfes. Y luego sé generoso e interac- ciona; al final uno tiene que ser uno mismo, porque el fraude se ve. La red social no va de yo, va de nosotros, de comunidad, de generar comunidad, y en una red so- cial lo importante para mí es crear esa comunidad, sea cual sea tu objetivo. –¿Qué tiempo dedica a preparar lo que va a transmitir en sus redes sociales? –En el día a día le dedico bastante tiempo. Si hay una no- ticia, la puedo subir en menos de diez minutos. Otras ve- ces, en la farmacia, me surge una duda sobre un tema; lo trabajo para mi propia farmacia, y de ahí también hago un post. En la farmacia, si no estoy dispensando, estoy estudiando continuamente; estudio dos horas al día, mí- nimo, no exclusivamente para redes, también para la far- macia, pero ese mismo estudio se convierte en posibili- dades de post. Así que me resulta difícil diferenciar, porque mi vida es la farmacia, mis redes, y el estudio que conllevan, pero es a diario, salvo el fin de semana, que lo reservo para mí. –¿Cómo se ve dentro de unos años en las redes sociales? –No lo sé. Llegué aquí de casualidad, soy autodidacta, de prueba-error, ahora me llena mucho y me divierte. Mientras una cosa me divierta, me sirva de desafío y me estimule, voy adelante. Tengo muy claro que en el mo- mento en que deje de divertirme o deje de sentirme fe- liz en las redes y me supongan una carga, las dejaré. ¿Llegará ese momento? No tengo ni idea. ¿Seré capaz de adaptarme a lo que venga? Lo veremos. No me cau- sa ningún pesar ni ningún problema. Creo que la vida es- tá para disfrutarla, para pasar plácidamente, más o me- nos, y mientras esté en las redes tan cómoda como ahora, seguiré. Cuando llegue el momento en que no lo esté, pues paso atrás y que entren los demás, no tengo ningún problema. l 18 octubre 2022 – el farmacéutico n.o 614